Detienen a narcotraficantes en Quequén
En las últimas horas, la Policía detuvo a un ex policía bonaerense y al hermano de un ex legislador provincial, acusados de formar parte de una banda de narcotraficantes que operaba en el puerto de Quequén. La banda se dedicaba a mover cargamentos de marihuana y cocaína que luego eran comercializados.
El operativo fue realizado por efectivos de la Prefectura en Quequén, Necochea y San Justo, en el partido de La Matanza. En total, fueron detenidas ocho personas.
Secuestro millonario
En los allanamientos, los uniformados lograron incautar 2 kilos de oro en lingotes, US$ 540.000 y $23.000.000. Además, encontraron armas de fuego, una camioneta Toyota Hilux y una computadora en una vivienda ubicada en la esquina de 58 y 167.
Se estima que el valor de los elementos secuestrados, incluyendo los lingotes de oro, la marihuana, la cocaína y el dinero en efectivo, supera los $1300 millones.
En otro allanamiento realizado en un departamento del piso superior de un centro comercial de Necochea, que pertenecía a uno de los detenidos, se encontraron celulares, balanzas de precisión, más dinero en efectivo y lingotes de oro.
Además, en una vivienda situada a orillas del río Quequén, los efectivos de la Prefectura hallaron más billetes, una moto de alta gama y dos camionetas 4×4.
Relación con el ámbito político
Uno de los datos que llamó la atención de los investigadores es que uno de los departamentos utilizados por la banda de narcotraficantes para guardar droga y dinero estaba ubicado en el mismo edificio donde funciona el Centro de Monitoreo municipal de Necochea.
Según fuentes de la investigación, todos los detenidos, incluyendo a seis hombres y dos mujeres, tienen vínculos con personas del ámbito político de Necochea, que han ocupado cargos en la municipalidad local y en la Legislatura bonaerense. Esto abre nuevas líneas de investigación sobre el tráfico y la comercialización de drogas en la región.
Avances en la investigación
Los investigadores analizarán minuciosamente los elementos secuestrados durante los allanamientos, especialmente los teléfonos celulares, con el objetivo de obtener más información sobre la red criminal que operaba en Necochea y Quequén. Se espera que estos avances permitan avanzar en la identificación y detención de otros implicados en el tráfico de drogas en la región.